VANESSA PI - MADRID - 29/03/2010 00:30
Los antitaurinos tomaron ayer el centro de Madrid. Miles de personas unas 20.000 según la organización, 2.500 según la policía salieron a la calle en protesta por la decisión de la presidenta de la Comunidad de Madrid de declarar Bien de Interés Cultural las corridas de toros.
Con el lema "La tortura no es cultura", la primera marcha que convocan de forma unitaria asociaciones ecologistas y animalistas de toda España comenzó a mediodía en la Plaza de la Villa de la capital. Recorrió la calle Mayor y finalizó, dos horas más tarde, con la lectura de un comunicado, en la Puerta del Sol.
Convocada por 16 entidades, como Ecologistas en Acción y el Partido Antitaurino Contra el Maltrato Animal (PACMA), y apoyada por otras 58 entre ellas el partido Els Verds, la marcha también contó con representantes de asociaciones de Suiza y Francia.
La presidenta del PACMA y portavoz de la plataforma convocante, Mireya Barbeito, justificó el motivo de la protesta. "Es bárbaro" que se consideren las corridas de toros un Bien de Interés Cultural, criticó. "El animal siente como nos podemos sentir nosotros, no se puede permitir que esto sea un espectáculo", denunció.
Barbeito recordó que "la asistencia a las corridas de toros descendió el año pasado en un 15%". También aludió a un aumento de población que dice oponerse a la tauromaquia en las encuestas. Pese a todo, denunció, "los taurinos piden subvenciones de 600 millones de euros al año".
"Esperanza, dimisión"
Una de las consignas más coreadas por los asistentes, alguno de ellos, altavoz en mano, fue la de "Esperanza, dimisión". Entre los centenares de pancartas y carteles que portaban los manifestantes también se leía "Torear, escuela de crueldad", "Derechos ya para los animales" o "Torero, cabrón, trabaja de peón". Decenas de manifestantes decidieron acudir a la marcha con sus perros.
A medida que fueron llegando a la Puerta del Sol, los manifestantes se fueron situando frente al escenario que se había instalado junto al nuevo intercambiador de Sol. El funerario Réquiem de Mozart sonaba por los altavoces.
Cuando el epicentro madrileño estuvo copado por los asistentes a la protesta, la escritora Ruth Toledano subió a la tarima y animó a los asistentes a seguir con la lucha: "Vamos a exigir la abolición de la tauromarquia", aseguró. La marcha también sirvió para recoger firmas para presentar una Iniciativa Legislativa Popular para abolir las corridas.
La presidenta de la Comunidad de Madrid anunció a principios de mes, mientras en el Parlament de Catalunya se debatía la posible prohibición de las corridas, su propósito de proteger estos festejos del mismo modo que se hace con el Monasterio de El Escorial, por ejemplo. De esta forma, será la primera vez que se declara un Bien de Interés Cultural no material. Valencia y Murcia se sumaron días después a la iniciativa madrileña.
Fuente: Público
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